En la temporada 1952/1953, el fútbol andaluz vivió una reestructuración nominal que también alcanzó a Linares: la categoría conocida como 'Primera Preferente' recuperó su antigua denominación de 'Primera Regional'. Pero más allá del plano administrativo, aquel curso significó un punto de inflexión en la historia del club linarense.
Uno de los cambios más relevantes fue el relevo en la directiva de la entidad. Diego Caro Bravo asumió la Presidencia, iniciando una etapa marcada por decisiones de calado simbólico. Entre ellas, quizás la más recordada —y sin duda la más perdurable— fue la adopción oficial de los colores azul y blanco como señas de identidad del equipo. El azul, elegido para la camiseta, no fue una elección casual: Rendía homenaje a la linarita, un mineral de intenso color azul descubierto en Linares en el siglo XIX y que lleva el nombre de la ciudad. El pantalón blanco completaba la nueva equipación.
Cabe señalar que esta indumentaria solo sufrió una modificación significativa durante el periodo comprendido entre los años 1962 y 1965. Más allá de ese breve paréntesis, el azul linarense ha ondeado con orgullo sobre los campos de toda España, dando lugar a que la afición sea conocida como "azulilla" o "los azulillos", y convirtiéndose en uno de los símbolos más reconocibles del fútbol en la ciudad.
Linares Club de Fútbol
Temporada 1972/73
Tercera División.
Este equipo quedó campeón de su grupo en la 3ª División, consiguiendo el ascenso a 2ª. Aún no existía la 2ª B.

11 - noviembre - 1977
Liga regular de Segunda División.
El Linares visita Riazor. El capitán del Depor, Bellod, entrega a Taito el banderín por su primera visita al estadio deportivista.
Fuente: @MticoLinarejos

Temporada 1979/80
Segunda División B.
Este fue el equipo que, en Puertollano, ascendió por segunda vez a Segunda División.
Dos semanas antes del decisivo encuentro Atlético Madrileño - Linares Club de Fútbol (25-jun-1989), el presidente del equipo rojiblanco, Jesus Gil (1933-2004) preguntó altivamente en una entrevista radiofónica:
- ¿Linares? ¿Dónde está Linares? Porque yo busco Linares en un mapa y no lo encuentro.
Aquella frase, teñida de desdén y arrogancia, no cayó en saco roto. En Linares, tierra de memoria y de orgullo, las palabras de Gil fueron recibidas como la mayor de las afrentas colectivas. La respuesta no se hizo esperar. El siguiente domingo, en partido contra el Pegaso la valla de Linarejos se cubrió de rudimentarias pancartas alusivas al díscolo presidente, destacando sobre todas ellas una que decía:
Desde mucho antes de que tomara la palabra, el recinto se llenó de cientos de vecinos que no habían acudido a escuchar, sino a recordarle que en Linares no se insulta impunemente. Cada intento de discurso era ahogado por abucheos, gritos y una lluvia de reproches. ¡¿Ahora si encuentras Linares?! Durante más de una hora, Gil intentó —sin éxito— imponer su voz. Al final, frustrado, abandonó el recinto y el municipio derrotado por una ciudadanía que había convertido el mitin en una manifestación de dignidad popular.
Aquel episodio, aún recordado con una sonrisa cómplice entre generaciones de linarenses, no fue solo una anécdota futbolera ni política. Fue una lección: En Linares, la palabra "desprecio" nunca encuentra eco. Solo respuesta.

25 - Junio - 1989
Fase de ascenso a Segunda División A.
Linares CF: Rey, Ordóñez, Pariente, Gabi, Martínez, Mesquida, Tortosa (Antoñito), Expósito, Toledano, Pedro Díaz (Quini) y Carles. El entrenador, Josu Ortuondo, no pudo contar, por sanción, con Aguirreoa, Vallina y Pérez Durán.
Atlético Madrileño: Diego, Solozábal, Juan Díaz, Guerrero, Cidoncha, Roca, Pinto, Sergio, De Diego, Pardina (Bosco) e Higuera (Abel). Entrenador Emilio Cruz.
Goles: 1 - 0 Diego (28’), 2 - 0 Sergio (44’) de penalti.
Árbitro: Sánchez Regidor, del colegio castellano-leonés.
Incidencias: Unos cuarenta autobuses se desplazaron desde Linares hasta el Estadio Vicente Calderón, que registró una media entrada.
Resumen: El Linares CF tuvo dos claras ocasiones al comienzo del partido. Toledano remató al palo y Tortosa no pudo concretar otra buena oportunidad. Desde ese momento, el Madrileño cogió las riendas del encuentro. A los linarenses les hubiera bastado con un punto para ascender.
Al año siguiente el entrenador del Linares, Yosu Ortuondo, fichó por el Atlético Madrileño y el equipo minero desapareció por impagos.
Más detalles:
https://threadreaderapp.com/thread/1088542493216509952.html
Trujillo
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